Sobre el riesgo de que EE.UU. entre en default

Señaló que en EE.UU. “cualquier aumento de gasto o impuesto tiene que ser aprobado por el Congreso y cualquier incremento de deuda que tenga el Gobierno también debe ser aprobado por el Congreso porque también van a pagarlo los contribuyentes. Ahora están discutiendo porque, como el déficit es muy alto, hay que empezar a recortarlo porque sino se va a acumular una deuda demasiado alta e impagable en el tiempo.” En ese sentido expresó que las diferencias por las cuales demócratas y republicanos no llegan a un acuerdo en el Congreso es porque estos últimos “consideran que para bajar el déficit en el tiempo debería haber una reducción del gasto público y aumento de impuestos” mientras los demócratas buscan hacer todo el ajuste sólo por el lado del gasto, excluyendo las medidas sobre los impuestos.

Por otra parte aseguró que el momento en que se alcance el nivel de endeudamiento que el gobierno de Obama busca evitar “no necesariamente tiene que ser el 2 de agosto sino que puede ser unos días después, porque esto es simplemente una estimación de cuándo se va a alcanzar ese límite. Si se llega a ese punto el Gobierno de EE.UU. no tendría ninguna posibilidad de afrontar los vencimientos de sus pasivos. Igual eso implicaría entrar en una moratoria y no en una cesación de pagos como le ocurrió a la Argentina”. No obstante remarcó que “esta puja entre los dos principales partidos de EE.UU. es posible que llegue incluso a una suspensión coyuntural de los pagos de deuda pero no va a llegar a una cesación de pagos.”

Sin embargo advirtió que el déficit estadounidense “no es sustentable en el tiempo, la deuda está creciendo demasiado rápido y sino hacen algo pronto en 2 o 3  años lamentablemente EE.UU. puede entrar en cesación de pagos en serio.”