Analistas y empresarios celebraron la prioridad de dejar atrás el default

Creen que, más allá de la discusión por la quita, hay que cerrar el capítulo para que llegue financiamiento.

La propuesta presentada por la Argentina ayer para cerrar la deuda con losholdouts fue muy bien recibida por analistas y empresarios locales, que consideraron que se trata de un gran paso adelante hacia la normalización del país y hacia la posibilidad de recibir financiamiento externo e inversiones, necesarias para sectores clave, como infraestructura y energía.

Sobre la propuesta, que implica una quita de alrededor del 25% sobre la sentencia, dependiendo de la alternativa que elijan los acreedores que participen en ésta, Cristiano Rattazzi, presidente de Fiat Auto Argentina, dijo: “Va a cambiar totalmente la perspectiva, va a bajar la tasa de interés internacional y la Argentina va a dejar de ser un paria que no paga sus deudas. Va a ser extraordinario para el país”.

De todos modos, Rattazzi opinó que el momento para cerrar por una suma inferior ya se perdió, pero lo importante es poder cerrar el tema de los holdouts, porque la Argentina tiene que salir del default para que empiece a llegar financiamiento e inversiones.

Ésta es la primera vez que la Argentina hace una oferta formal a los holdouts. Este acuerdo de reestructuración preliminar ya ha sido aceptado por algunos fondos principales, como Montreux Partners o Dart Management. Esta aceptación se suma al acuerdo alcanzado previamente con los 50.000 bonistas italianos de TFA.

En tanto, Aldo Abram, director de la Fundación Libertad y Progreso, destacó que, si aceptan los acreedores, será muy bueno. “Hay que tener claro que porque se manejó mal el juicio con los holdouts, lo perdimos y quedó firme la deuda que fijó el juez. Por lo cual, lo que hay que hacer para salir del default es pagarla completa. Si encima de eso, aceptan un 25% de quita, mucho mejor”, señaló.

No obstante, Abram advirtió que lo que él cree es que van a contra- ofertar desde el otro lado. “Hay que ver si los holdouts que ganaron el juicio aceptan que se lo paguemos en el tiempo y con una quita. Esperemos que la acepten. Más allá de eso, este tema se tiene que cerrar lo antes posible”, subrayó.

La aceptación de la propuesta significará, analizó Abram, salir del default selectivo, con lo que se pasará a ser un país mucho más atractivo para el financiamiento y las inversiones. “No hablamos sólo de financiamiento para el sector público, sino también para el sector privado, que necesita esos capitales para poder invertir, producir y generar empleo”, destacó el economista.

Rodrigo Álvarez, director de la consultora Analytica, comentó que le parece que lo que trata de hacer el Gobierno es cerrar un capítulo que le ha costado mucho a la Argentina. “Creo que hay una oferta en firme y eso es importante. Respecto de la quita, no parece demasiado agresiva, pero habrá que ver cuáles fueron las consideraciones que llevaron a ella”, acotó el especialista.

Nuevo capítulo

De ser aceptada la propuesta, opinó Álvarez, se abrirá el capítulo más importante, que es reinsertar a la Argentina financieramente en el mundo. “Lo que hay que entender es que la transición de una economía como la que teníamos a una más normalizada requiere financiamiento, y éso es lo que puede llegar si se cierra un acuerdo con losholdouts. La lógica de vivir con lo nuestro nos llevó a una economía totalmente estancada y sin inversión. Volver al financiamiento externo es algo necesario”, expresó.

Miguel Bein, director de Estudio Bein, dijo que el descuento que está rondando le parece que es el descuento del consenso. “Suponer que la Argentina podía conseguir más que un 30 por ciento de descuento era una postura irreal de los que tenían ese tipo de expectativas”, afirmó. “Si con esta propuesta, el país termina de solucionar este tema, se abrirán los mercados y vendrá el acceso a financiamiento de mediano plazo y a un costo razonable para poder impulsar proyectos de inversión”.

El economista Agustín D’Attellis fue uno de los que se mostraron disconforme con la propuesta. “El acuerdo no me parece para festejar en caso de que se acepte; es un preacuerdo, todavía falta que pase por el Congreso y algunas cosas más, pero no me parece que en caso que eso se cierre sea un festejo, porque estamos hablando de un 25 por ciento de quita sobre el valor que obtenés a partir de la cuenta que hizo el juez Griesa”, explicó.

D’Attellis comentó que el hecho de que haya un apuro tan grande para cerrar el tema “está directamente vinculado con la idea de recurrir rápidamente a los mercados internacionales y retomar una dinámica de endeudamiento y restricción de la economía de los últimos dos o tres años”.

Publicado en La Nación.-