Agustín Etchebarne
Economista especializado en Desarrollo Económico, Marketing Estratégico y Mercados Internacionales. Profesor en la Universidad de Belgrano. Miembro de la Red Liberal de América Latina (RELIAL) y Miembro del Instituto de Ética y Economía Política de la Academia Nacional de Ciencias Morales y Políticas.
PANAM POST – El Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) confirmó una caída de la actividad económica en Argentina del 5,8% en el mes de septiembre. Si bien el resultado revela varias caídas consecutivas, se revirtió una tendencia que venía dando a la baja: junio había arrojado una merma del 6,8%, julio del 2,7% y agosto de 1,6%. El derrumbe era esperado por las autoridades, dados los recientes desajustes que mostrarían un impacto en la medición en cuestión.
Por su parte, el Estimador Mensual de Actividad Económica, también arrojó un número negativo: una caída del 1,9% con respecto al relevamiento de agosto. El EMAE está relacionado a la generación de riqueza del conjunto total de productores de bienes y servicios en el país.
Según las consultoras privadas, el año próximo, en el que se disputarán las elecciones presidenciales y Mauricio Macri se juega su reelección, no mostraría una mejora en el primer trimestre y habrá que esperar al segundo para comenzar a percibir un cambio en la tendencia.
Enojo en los economistas liberales
Agustín Etchebarne, director ejecutivo de la Fundación Libertad y Progreso, advirtió que lo grave de la situación es que “ningún partido político esté ofreciendo un programa de reformas estructurales” que reviertan la situación. En la opinión del economista es fundamental eliminar la inflación, bajar el gasto público, desregular la economía y flexibilizar el mercado del trabajo. Para Etchebarne, una reforma semejante sería la única que posibilitaría un crecimiento al 7%, que sería el único escenario posible para el pago de la deuda.
“Argentina está viviendo una vez más el peor de los ajustes: el que está forzado por la desaparición del crédito voluntario. En estas ocasiones la clase política se pone de acuerdo para hacer siempre lo mismo. Una mega devaluación y aumento de impuestos. En el caso actual, el aumento del tipo de cambio ya lleva un 112%. No puede sorprender que la inflación termine con un 50% este 2018, y que la economía haya entrado en una fuerte recesión. Es cierto que la sequía y sus repercusiones en el agro ha generado problemas, pero no menos cierto es que la principal responsabilidad es el fracaso de la política gradualista”, resaltó.
En su diálogo exclusivo con PanAm Post, el especialista de Libertad y Progreso anticipó que los próximos meses serán duros para la población por causa de la caída del salario real, alrededor del 12%. Las pequeña y mediana industria también tendrá serios inconvenientes por la presión de las altas tasas de interés, como también por la caída del consumo y de las expectativas.