“La economía argentina se enfermo de coronarivus con patologías preexistentes graves”

RADIO JAI – La Asociación Internacional de Swaps y Derivados (ISDA) definió hoy activar los seguros de default (CDS), luego de que Argentina no abonara los 503 millones de dólares de intereses de los bonos Globales 21, 26 y 46 el pasado 22 de mayo, cuando terminaban los treinta días de gracia posteriores al vencimiento original. Así, los acreedores que tengan CDS cobrarán en conjunto unos 1.500 millones de dólares.

Al tratarse de un acuerdo entre privados, la decisión no afecta al país. La contratación de CDS comenzó a crecer desde el estallido de la crisis de deuda de 2018 y continuó durante el proceso de reestructuración en marcha.

Aldo Abraham, economista, explicó estos conceptos y se refirió a la situación económica que vive la Argentina y que se verá afectada tras el paso del Covid-19.

“En términos de costo para el gobierno no le afecta porque son operaciones que se realizan entre privados. Unos apuestan a que Argentina no va a cumplir sus compromisos y otros que sí. Cuando se da esto, alguna de las partes tiene que poner la pata que le prometió a otro. En este caso, Argentina no cumplió con el pago de una serie de bonos, y esto gatilló la decisión de que el país entraba en default y esos seguros se tenían que cobrar”, explico Abraham.

En otro aspecto, ya vinculado con el futuro de los argentinos y no solo de los privados, hoy surgió un buen augurio de parte del ministro de Economía, Martín Guzmán. Admitió que si efectivamente llegamos a una reestructuración exitosa de la deuda, nuestro sector productivo va a tener mayor crédito hacia adelante, y esa es la realidad -afirma Arbaham-, el beneficio que vamos a tener porque necesitamos mucho crédito, para sacar al país de este lío en el  que nos hemos metido nosotros solos antes, y más aún ahora con la cuarentena.

Lamentablemente la moneda argentina está pagando los costos de no haber hecho las cosas bien en el pasado. El valor del peso se está destruyendo. Y para comprender el porqué de todo esto, el economista ejemplifica con un simple ejercicio: “Para entender hay que ver que pasa en los países del alrededor: Uruguay, Paraguay, Chile, Colombia, Perú, no ves que sus monedas se estén destruyendo. Y eso es porque en el pasado sus políticos administraron austeramente al Estado”. Los ciudadanos de esos países, cuando llegan estos momentos de incertidumbre, cuando se demanda más moneda local, tienen un Banco Central que puede emitir más sin que signifique eso  la destrucción de su moneda. Acá eso no es factible.

La economía argentina viene siendo un enfermo terminal agonizante desde hace décadas. Y para un momento en el que “surfeamos” la ola del coronavirus, la analogía del economista es más que precisa: “Nuestra economía se enfermó de coronarivus con patologías preexistentes graves. Y como todo enfermo de coronavirus que tiene enfermedades previas, si logra zafar, el daño que tendrá será mayor y la debilidad que quedará tras esa patología preexistente,  será mayor”.

Argentina sin duda, necesita un respirador que le dé aire.