China está treinta puestos por encima de Argentina en el Índice Internacional de Derechos de Propiedad 2020 (IPRI)

AGROSITIO – El IPRI mide 129 países para ofrecer una visión completa de la solidez de los derechos de propiedad. Se compone de 10 elementos agrupados en tres componentes básicos:

Entorno legal y político (LP) que proporciona información sobre la solidez de las instituciones de un país.

Los derechos de propiedad física (PPR).

Los derechos de propiedad intelectual (IPR), que reflejan las dos formas. De los derechos de propiedad decisivos para el desarrollo socioeconómico de los países.

Con un puntaje de 6,045 China se ubicó en el puesto 49, ni más ni menos que 30 puestos por encima y con notorias ventajas para el gigante asiático en materias de acceso a créditos e independencia judicial.

La política de propiedad intelectual juega un papel silencioso en el apoyo de nuevas ideas e inversiones que son un indicador clave para la prosperidad económica y social. Cada trabajo de alguna manera produce o se basa en la creatividad y el carácter comercial.

Aldo Abram Director Ejecutivo en la Fundación Libertad y Progreso destacó que “resulta sorprendente que China siendo un país Comunista, en términos políticos, decidió implementar medidas económicas de respeto por las reglas de juego del mercado; libre empresa y propiedad privada, logró sacar de la pobreza a millones de personas desde 1962 a la fecha siendo uno de los países que más creció en el mundo. Argentina insólitamente suma pobres y recorre el camino inverso a medida que interviene la economía; cercenando la propiedad intelectual; interviniendo mercados; empobreciendo a su gente; ensanchando la informalidad y sumando desempleados”.

El economista Dr. Hernando De Soto mencionó que los derechos de propiedad “garantizan la libertad y brindan incentivos que permiten a las personas vivir y trabajar con un propósito y no quedar excluidas de la economía formal. Sin un sistema de propiedad formal integrado, una economía de mercado moderna es inconcebible”.

La pandemia y la espera de una vacuna requieren una respuesta rápida y confiable en los sistemas de propiedad intelectual y políticas públicas que respalden a las empresas. La Dra. Sary Levy Carciente, autora de IPRI señaló que el caso argentino “El último índice muestra una mejora de Argentina con respecto al 2019 de 3 posiciones. Esto se debe a que parte de los datos utilizados a febrero de 2020 responden a indicadores en su mayoría del 2019 – 2018 y que actualizan anualmente, aunque hay excepciones como el Patent Index, cada 5 años”.

Por su parte Lorenzo Montanari, director ejecutivo de Property Rights Alliance y editor del índice, señaló que “durante este tiempo de pandemia, es evidente cómo la innovación y los derechos de propiedad intelectual juegan un papel importante en la búsqueda de soluciones para Covid-19. Los derechos de propiedad no son sólo uno de los pilares más importantes de cualquier sociedad libre, sino también los derechos humanos como se establece en el artículo 17 de la Declaración Universal de Derechos Humanos de las Naciones Unidas”.

TOP 3

Como promedio, la muestra de los 129 países mostró una puntuación de 5,73, donde el Entorno Legal y Político (LP) fue el componente más débil con una puntuación de 5,14, seguido por el componente de Derechos de Propiedad Intelectual (DPI) con una puntuación de 5,55. Finalmente los derechos de propiedad física (PPR) fueron los componentes más fuertes con una puntuación de 6,5.

Tres países, Finlandia, Suiza y Singapur, han logrado las mayores protecciones de los derechos de propiedad. Finlandia sigue siendo el primero en la general en protección de los derechos de propiedad, con una puntuación de 8. 654. Si bien la guerra comercial entre China y los Estados Unidos ha llamado la atención sobre la importancia de los derechos de propiedad intelectual, la brecha de propiedad intelectual sigue siendo la misma. Estados Unidos obtuvo una puntuación de 8.050, mientras que China obtuvo una puntuación de 6.045.

La entidad cuenta con la cooperación con 122 think tanks en todo el mundo, incluida la Fundación Libertad y Progreso.

Fuente: Libertad y Progreso