Dolarizar, una clave del programa económico liberal

Consejero Académico en Libertad y Progreso

INFOBAE  Los liberales impulsamos buenas ideas sin someternos a mitos aceptados. La libertad y habilidades individuales conectan nuestra mirada. Comienzo encadenando referencias basales para esta nota.

Karl Popper, filósofo de la ciencia, estableció que una teoría nunca puede ser probada, apenas puede ser aceptada en tanto no sea refutada en observaciones veraces. Por otro lado, el ilustre economista Francis Y. Edgeworth descubrió que los individuos inciden bajo dos estilos, dependiendo de si actúan con o sin la conformidad de otros afectados por sus acciones. El primero puede denominarse convenio, el segundo conflicto. Por su parte, John Commons, principal exponente de la economía institucional norteamericana y el premio Nobel Oliver Williamson, desarrollaron que la transferencia de propiedades -por cualquier motivo- debe ser la base del análisis económico, diferenciando las transacciones voluntarias. Postulan que los individuos superan conflictos descubriendo las insuficiencias respectivas y la necesidad de ordenarse. Efectivamente, según Commons “toda institución es una acción colectiva que controla y expande la acción individual”. La cooperación resulta, en última instancia, no de la armonía de los neoclásicos, si no de acciones deliberadas coordinando los convenios posibles, con todas sus variantes. La transacción reúne tres elementos:

A – Conflicto o desorden. Situación incompatible en que distintos agentes intentan algo al que otros se oponen.

B – Ventajas compartidas de reconocer derechos individuales, especializando las tareas.

C – Orden o concierto. Grado en que se concretan los negocios en la forma prevista.

Aquellos que “demuestran la imposibilidad” de imponer un tipo de cambio de conversión de 2.000 pesos erran completamente

Expongo brevemente las ventajas de emplear al dólar. A pesar de las abrumadoras declaraciones contra dolarizar, mayorías lo prefieren y utilizan. Según FMI, el dólar estadounidense era el más demandado para las reservas internacionales, con 6,4 billones; y segundo viene el euro, con 2,1 billones. Las demás monedas no son relevantes.

En las transacciones internacionales, el dólar participa en 2,9 billones promedio diarios. El euro en 1,1 billones; el yen japonés en 554.000 millones diarios; la libra esterlina en 490.000 millones; las demás monedas son mucho menos empleadas. Edgeworth demostró que la precisión de los precios aumenta con el valor de los negocios. La moneda mas utilizada en el mundo genera las condiciones preferidas de vida. La inflación local se agudiza tanto como la moneda doméstica se deprecie respecto del dólar. De hecho, todas las hiper acompañaron devaluaciones.

Insisto, todas las imposibilidades aducidas se derrumbarían ante la revolución de las expectativas con el programa. Aquellos que “demuestran la imposibilidad” de imponer un tipo de cambio de conversión de 2.000 pesos erran completamente. A los liberales nos espantan las imposiciones de un grupo de funcionarios estableciendo las magnitudes de equilibrio macro. No creemos posible que los controles, cepos, sean idóneos para disminuir los niveles generales de precios. Cuando sólo consiguen estropear nuestras libertades y disfrute de la vida.

No creemos posible que los controles, cepos, sean idóneos para disminuir los niveles generales de precios

Los derechos de cada uno son la cuestión básica de las sociedades: ¿quién es el dueño y su extensión? En tanto los políticos incidan, serán nuestros socios y recibirán su correspondiente tajada.

David Hume, economista y filósofo fundamental, exponía las ventajas de asociarse: “Nuestros poderes aumentan conjugando fuerzas. Especializando empleos, las habilidades se hacen productivas. Estableciendo auxilios mutuos quedamos menos expuestos a malas fortunas y abusos”. Sus obras principales son Tratado de la naturaleza humana (1739) e Investigación sobre el entendimiento humano (1748).

En efecto, el atropello acaba con el disfrute y posesión de aquellos derechos que hubiéramos adquirido. En tanto existan corrupciones, las personas seremos menos industriosas e incentivadas.

Por lo tanto, la inestabilidad de la propiedad es el impedimento principal de la prosperidad y una de las tres leyes principales de cuya estricta observancia depende la paz y seguridad de las sociedades. Las otras dos leyes son la transferencia por consentimiento y el cumplimiento de las promesas. La protección de las libertades y seguridades de las personas condicionan los derechos de propiedad, que son menos apreciados donde la vida y facultades humanas están menos protegidas.

Para John Locke, la preservación de la vida y de la propiedad es la razón del Estado. Pues el abuso de poder acaba con el disfrute y posesión de los derechos que hayamos adquirido. No obstante la democracia redimida, creció la inseguridad. En los últimos 40 años. atropellos crecientes:

La inestabilidad de la propiedad es el impedimento principal de la prosperidad y una de las tres leyes principales de cuya estricta observancia depende la paz y seguridad de las sociedades

La inflación y la volatilidad de las reglas nos despojan diariamente de propiedades, contratos, sueldos. En tanto las trabas burocráticas dificultan las actividades, buena parte de las promesas suelen incumplirse. En el ultimo siglo, la inflación anual promedió 105%, con picos de 400% y mínimos cercanos a cero.

La inflación y cambios de reglas nos despojan diariamente de propiedades, contratos, sueldos.

Nuestra decadencia no sorprende. Dirigentes políticos engrosan patrimonios y privilegios sin protegernos como prometieron;

Así, la brecha entre los PBI por habitante: desde el mínimo de USD 300 anuales de Burundi, USD 14.000 de Argentina, y USD 100.000 de Irlanda, reflejan tales diferencias de aptitudes contractuales. Efectivamente, las libertades y seguridades de contratar confirman que los recursos responden a restricciones macroeconómico-institucionales. Cuánta más amplias las seguridades de contratar, mayor el valor real de los trabajos.

Competencia de monedas es insostenible, demasiado costoso, en una misma sociedad. La propuesta de Hayek: que cada persona elija la moneda que prefiera, olvida que la unidad de cuenta es el lenguaje de las transacciones. Mientras el idioma es una institución que se afirma con el uso, pues no es conflictiva, la unidad de valor es altamente debatible. A los acreedores les conviene fortalecerla, a deudores devaluarla. Por eso la tenencia de distintas monedas trabaría los negocios. Sin embargo, la competencia existe entre monedas de distintos países, mediante los mercados de divisas dispuestos a pagar el costo. Condición que no se da en mercados de sustancias altamente estandarizables: tipos de petróleo, productos agrícolas y otros. En la Argentina también los inmuebles para los propietarios.

La inflación y la volatilidad de las reglas nos despojan diariamente de propiedades, contratos, sueldos

La banca Simmons consiste en prohibir financiar préstamos bancarios con los depósitos a la vista, imponiendo exigencias de encajes del 100% de los depósitos. Intentaba evitar el impacto negativo de las corridas bancarias. Nade menos que Friedman, la recomendaron para estabilizar la oferta monetaria. ¿Cuál es la dificultad? Si los bancos no pudieran prestar lo captado por los depósitos, ese monto iría al emisor de los encajes. La relación préstamos/depósitos se mantendría constante, independiente del monto de los depósitos. Entonces alguna entidad fuera del sistema debiera ajustar el uso de los fondos para equilibrar las cuentas. Un remedio posible para algunos; a cargo de quienes no se benefician de la norma. Aparte, los depositantes debieran pagar al banco los servicios prestados. En lugar de un negocio compartido entre depositantes y prestamistas, otra imposición tan significativa como el costo del servicio.

Estos ejemplos confirman que las propuestas deben ser consistentes con las instituciones vigentes. Las libertades también están sujetas a restricciones institucionales. El error en estas iniciativas es desconocer las miradas de Popper y Commons. Las transacciones, como todo intercambio comunicacional, requieren de una referencia estable. La moneda cumple ese rol en tanto su identidad y valor sean previsibles. Alguna institución confiable debiera ser responsable frente a los usuarios.