Jorge Hugo Herrera Vegas: “El estancamiento de la economía de Brasil es una pésima noticia para nosotros”

En el marco del ciclo de desayunos de Libertad y Progreso en el Hotel Feirs Park, realizados con apoyo de la Fundación Naumann y RELIAL, el ex embajador de Brasil Jorge Hugo Herrera Vegas señaló que “el estancamiento de la economía brasilera es una muy mala noticia para nosotros los argentinos, que tenemos en Brasil a nuestro principal socio político y económico”.

Según Herrera Vegas, abogado de la UBA y Premio Kónex 1998, Argentina, Uruguay y Paraguay son los países más perjudicados de la región por lo que pasa en Brasil. “La participación de la Argentina en las importaciones totales de Brasil es de aproximadamente 6%. Pero ese flujo, en el bienio 2012-13 representó el 21% de las exportaciones argentinas. En 2016, el intercambio entre la Argentina y Brasil en 2016 alcanzó a 22.500 millones de dólares. En 2011 había llegado a 39.616 millones y desde entonces prácticamente ha caído a la mitad. El año pasado exportamos a Brasil 9.000 millones e importamos 13.600 millones con un déficit de 4.600 millones. Las economías están muy vinculadas. Dante Sica ha calculado que por cada punto que crece el PBI brasileño el nuestro crece ¼ de punto”, explicó Herrera Vegas.

“Brasil sufre la peor recesión de su historia. La incertidumbre respecto de su retorno al crecimiento es muy elevada. Economistas importantes están corrigiendo a la baja, de 1% a 0,5% el crecimiento de este año. Por otro lado, no surge ningún nuevo líder perfilado con probabilidades serias para ganar la elección presidencial de octubre del año que viene. Ni siquiera podemos estar seguros de que Michel Temer podrá llegar a completar el mandato de Dilma, que es lo que disponen las normas constitucionales. Tampoco se sabe si Temer, en el caso de permanecer en el poder podrá avanzar y lograr la aprobación de las reformas previsional y laboral, que junto con la enmienda constitucional –que sí logró aprobar para poner un tope al gasto público– constituían los tres principales objetivos que se fijó para su gestión. Hechos recientes ponen en peligro el éxito que parecía probable”, destacó el ex embajador en el país vecino.

Para Herrera Vegas, si bien muchos datos de la economía brasilera siguen mostrando solidez, es muy preocupante que el PBI de la principal economía latinoamericana se contrajo 3,6% en 2016 después de haber retrocedido 3,8% en 2015. “Mas de 7% en 2 años. Desde 1930 nunca en Brasil se habían registrado dos años seguidos de caída del producto. Este resultado fue un balde de agua fría para el frágil gobierno surgido de la destitución por juicio político de la presidenta Dilma Roussef”, señaló.

El futuro de Temer

“Hoy es difícil pronosticar qué ocurrirá a Temer. Cinco años fue vicepresidente de Dilma. Ésta lo acusa de haber orquestado un golpe de Estado parlamentario con ayuda de su amigo Eduardo Cunha, apodado el Frank Underwood de la política brasileña. Por otro lado, el pragmatismo de Temer le ha granjeado el apoyo de los mercados, interesados en la recuperación económica del país. Ha gobernado sin prestar atención a las críticas sobre su falta de legitimidad y la impopularidad de sus políticas de ajuste, como si confiara en que podrá lograr con su gestión que Brasil deje atrás su crisis. Probablemente quiere pasar a la historia como el estadista que logró, como acto final de su carrera política, reponer a Brasil sobre los rieles”, explicó Herrera Vegas.

Según el ex embajador, Brasil resurgirá, debido a que es un país que por sus dimensiones territoriales, demográficas y económicas, reasumirá un papel protagónico importante para nuestra región y el mundo. Y Argentina seguirá siendo un socio principal de Brasil, con una relación estratégica equivalente a la que mantienen Francia y Alemania.
“Argentina goza de un momento excepcional y bien merecido. Estaremos bajo los reflectores el año que viene. Macri ejerciendo la presidencia pro-tempore del G-20 y hospedando a los jefes de estado. También la reunión de la OMC. También ingresando a la OCDE. Aunque por otro lado nuestra situación económica sigue siendo preocupante. Días pasados Miguel Ángel Broda, después de analizar críticamente algunos aspectos de las políticas que está aplicando el gobierno dijo: ““Pero no olvidemos que estos muchachos nos sacaron del infierno””. Coincido plenamente”, señaló Herrera Vegas.

Para el diplomático, la Argentina tuvo un rol vital en la regresión del populismo en Sudamérica. “En mi opinión sin el triunfo de Macri, por un estrecho margen y ayudado por los errores provocados por la “hubris” de CFK, la clase política brasileña, infectada por la corrupción, no hubiera podido desalojar al PT del poder. Ni siquiera creo que el Congreso de Brasil se hubiera animado a destituir a Dilma sin el cambio iniciado por Macri. Con regímenes populistas triunfantes electoralmente en la Argentina y más de una década y media de ejercicio del poder en Venezuela es difícil que la clase política brasileña se hubiera animado a la destitución”, dijo.

“A contrario sensu. Con la Argentina y Brasil coincidiendo con un modelo político y económico que deja atrás el populismo, es difícil que nuestra región no termine consolidando ese modelo que podríamos llamar democracia social de mercado, o algo equivalente. Creo que las próximas elecciones legislativas en la Argentina en octubre darán la pauta sobre la posibilidad de consolidar un camino tendiente a erradicar el populismo y la corrupción en América del Sur. En el temá corrupción, Brasil con el Juez Moro fue el que ha dado, y continúa dando, el ejemplo”, finalizó Herrera Vegas.