La Fundación Libertad y Progreso manifiesta su preocupación y expresa su repudio a las graves acciones contra las personas y la propiedad ocurridas en las repúblicas de Ecuador y de Chile. La característica de estos acontecimientos pone en evidencia la existencia de una organización y coordinación externa a los países atacados. Los lazos con la dictadura venezolana de Nicolás Maduro, así como con la dictadura cubana, son más que evidentes. Lo convalidan sus declaraciones de apoyo a esos vandálicos los hechos y las de los movimientos de izquierda de otros países que les guardan simpatía.
Nuestra Fundación adhiere a la declaración de la Organización de Estados Americanos del 16 de octubre pasado que afirma que ”las actuales corrientes de desestabilización de los sistemas políticos del continente tienen su origen en la estrategia de las dictaduras bolivariana y cubana, que buscan nuevamente reposicionarse, no a través de un proceso de reinstitucionalización y redemocratización, sino a través de su vieja metodología de exportar polarización y malas prácticas, pero esencialmente financiar, apoyar y promover el conflicto político y social”.
