octubre 22, 2018

Politica
Editor L&P

El Estado de Bienestar: Trabajo forzado para beneficio ajeno

Por Francisco Lucero | Decir que la redistribución es una forma de esclavitud no es ninguna hipérbole. Confiscar los ingresos de Juan producto de diez horas semanales de trabajo equivale a confiscarle “diez horas” de trabajo o, en otras palabras, forzarle a trabajar diez horas a la semana en beneficio de otro. Como atinadamente advierte Robert Nozick en su libro Anarquía, Estado y Utopía, incluso quienes aceptan la imposición de tributos se oponen a que el Estado obligue a trabajar a un hippie desempleado. De igual modo se opondrían a que el Estado obligara a todos los ciudadanos a trabajar diez horas extras a la semana para beneficio de terceros. Pero confiscar las ganancias de diez horas de trabajo les parece aceptable.