EL LIBERAL – Diferentes economistas consultados por EL LIBERAL expresaron visiones disímiles respecto de cómo impacta en la economía el escenario de incertidumbre política que se vive en esta etapa preelectoral, e indicaron escenarios futuros que van desde una corrida cambiaria a una calma provisoria, y en la perspectiva más optimista, un panorama de crecimiento moderado desde este trimestre.
Los analistas Aldo Abram, de la Fundación Libertad y Progreso; Camilo Tiscornia, de CT Consultores: Jorge Colina, de Idesa y Aldo Ferreres de OJF y Asociados expresaron sus perspectivas en este contexto incierto en lo político.
En primer término, Aldo Abram indicó que “cuando hay incertidumbre de cualquier tipo y en este caso es electoral, lo que sucede es que la gente en la Argentina reacciona muy fuertemente porque ha habido tantas crisis, que sabe que cuando llega una tiene que estar muy preparado”. Agregó que “entonces lo que hace es recortar gastos, inversión, ahorra en dólares, se saca los pesos de encima. Lo que termina en una crisis de corrida cambiaria y si extranjeros y argentinos estamos sacando nuestros ahorros de la economía, fugando capitales, eso contrae el financiamiento y la economía”.
Añadió que “entre que se deja de consumir, invertir y sacar financiamiento, se achica el crédito y se va a una recesión. Cuando la fuga de capitales es muy fuerte y también la incertidumbre y eso creo que es lamentablemente lo que se nos viene en el segundo trimestre, si vamos a ser Venezuela o un país normal”.
Puntualizó que “la actual recuperación que produce el campo está siendo debilitada por la fuga de capitales. Pero en el segundo semestre primaría la salida de ahorros de argentinos y extranjeros, revirtiéndola”.
Tiscornia
A su turno, el economista Camilo Tiscornia indicó que “desde febrero que está todo muy influido por la cuestión política. Diría aún más: esta decisión de Cristina Kirchner de pasar como vicepresidenta en la fórmula despertó alguna posibilidad de decir que aunque ganase Cristina por ahí la cosa no sea tan dramática de entrada”.
Agregó que “si ganara ella obviamente vamos a un gobierno con más intervención, como era ella antes. Pero evidentemente como no tiene tanto sustento político eso la obligaría a hacer algunas concesiones”. En este sentido indicó que “eso se reflejó un poco esta semana en los indicadores financieros locales: bajó el riesgo país, el dólar se mantuvo en calma, las tasas bajaron un poco, pero todo esto es muy provisorio. Por eso, como la parte política no está cerrada, en cualquier momento puede haber un deterioro, una reversión”.
Puntualizó que “más allá de lo financiero, en materia de actividad económica se está pagando un costo porque hay sectores que están andando mejor: la construcción y el agro, pero otros, no. El consumo está planchado, toda la incertidumbre y las tasas altas están complicando mucho la actividad”.
No obstante señaló que “hay un dato interesante, en el indicador de la confianza del consumidor del Instituto Di Tella que en mayo señala una recuperación del 6% y es como que la gente vio el panorama un poco más tranquilo, se calmó el dólar, la inflación bajó un poco, hubo alguna mejora ahí. Pero esto es muy precario porque aún la parte política no está definida. En la parte política es un escenario muy complejo, de incertidumbre y eso se paga con actividad económica”.
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