Aldo Abram no descartó que luego de los comicios se resuelva una ampliación del “cepo cambiario” para “forzar” a cada ahorrista a quedarse con sus pesos y no comprar dólares.
Adrián Ravier -Las Leliq tienen como contrapartida 1,2 billones de pesos que los depositantes en plazo fijo (mayormente) pusieron en manos de los bancos, y estos a su vez compraron esos bonos del Central, en lo que se suele llamar un proceso de esterilización de dinero.