Estiman que fue de $110.000 millones déficit primario en octubre

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Iván Cachanosky
Economista, colaborador de Libertad y Progreso

Lic. en Administración de Empresas. Magister en Economía Aplicada de la UCA. Doctorando en Economía en la UCA.

ÁMBITO FINANCIERO – Por Carlos Lamiral

Mientras avanzan las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por un nuevo acuerdo de largo término para refinanciar la deuda, el ministro de Economía, Martín Guzmán, sigue sumando datos para poner sobre la mesa. Entre ellos, los números del sector público nacional que en octubre habría registrado un déficit primario del orden de los $110.000 millones, según las estimaciones de Lorenzo Sigaut Gravigna, economista en jefe de Ecolatina.

“Fue un buen mes, de bajo déficit relativo y que logró ser financiado genuinamente, es decir, sin emisión”, señaló Sigaut Gravigna en diálogo con Ámbito. De acuerdo con las estimaciones de Ecolatina, el quebranto financiero del sector público nacional se ubicaría en torno de $140.000 millones. El dato oficial se conocerá hoy, de acuerdo con en el calendario de difusión de la Secretaría de Hacienda.

Según señaló el economista, el mes pasado “se devolvieron los adelantos transitorios” que le había prestado el Banco Central al Tesoro. Por otro lado, explicó que hubo colocaciones netas del gobierno por $200.000 millones ya que “tenía que atender vencimientos por $200.000 millones y se colocaron bonos por $400.000 millones”. “Cubrieron el déficit financiero y les sobró para devolver $100.000 millones al Banco Central”, explicó el analista de Ecolatina.

Sigaut Gravigna advirtió, no obstante, que la estrategia de financiamiento basada en bonos en pesos atados a la cotización del dólar puede ser “discutible”, en tanto que “podemos -dijo- estar hipotecando el futuro” si la economía no logra un nivel de recuperación que permita atender la nueva deuda que se va generando.

“Los bonos dólar linked funcionaron. Hay mucho miedo a una devaluación y si uno ofrece instrumentos de ese tipo la gente se saca los pesos de encima”, explicó.

De acuerdo con datos de la Oficina del Presupuesto del Congreso (OPC), que va midiendo la ejecución de las partidas por lo devengado, el mes pasado el déficit fiscal fue algo menor que el base caja. Fue de unos $75.000 millones en el primario y de $106.000 millones el financiero.

El informe de la OPC destaca que sin incluir las utilidades remitidas por el Banco Central al Tesoro, los ingresos de la Administración Pública Nacional cayeron en octubre 11% en términos reales respecto al mismo mes del año anterior, mientras que los gastos primarios crecieron 22,9%, fundamentalmente por la atención de la emergencia sanitaria. Si se toma en cuenta que el BCRA le pasó al Tesoro utilidades por $30.000 millones, los ingresos cayeron 5,5%.

Un punto que el Gobierno va a resaltar ante los enviados del FMI en Buenos Aires es que la situación del gasto público está dentro de cánones aceptables para el actual contexto. De acuerdo con el análisis de la OPC, los gastos primarios llevan siete meses seguidos de crecimiento a un ritmo de dos dígitos. Pero eso se explica enteramente por las erogaciones derivadas de la pandemia de covid-19. Si se excluye eso, el gasto crecería solo 4,5% interanual, en términos reales.

Al respecto, el economista Iván Cachanosky, consideró que el menor crecimiento del gasto “no covid” forma parte de señales de Guzmán al FMI, con la mirada puesta en las negociaciones.

Explicó que para fin de año, por estacionalidad existe un mayor nivel de gasto y que ello va a impactar sobre el resultado final. El analista de la Fundación Libertad y Progreso estimó que el déficit fiscal financiero total será del 11% en 2020.

Y consideró que a Guzmán “le fue bien” en octubre con las licitaciones de bonos atados al dólar. “Creo que recaudaron por impuestos más de lo que esperaban y eso les permitió devolver $100.000 millones al BCRA que fue una buena señal fiscal también”, opinó. Para Cachanosky, el monto devuelto por el Tesoro a la entidad monetaria “es poco”, pero constituye “una buena señal de cara a las negociaciones con el FMI”.

“Me parece que están dando señales para demostrar cierta predisposición con el Fondo, como es el caso de la fórmula de ajuste de las jubilaciones”, señaló el economista.

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