Remarcan que la Argentina atraviesa un escenario de “estanflación” desde 2011, y que continuará durante meses

LA MAÑANA ONLINE El economista Aldo Abram se refirió al escenario actual, consideró que a fin de año la inflación interanual se ubicará en torno al 180% y marcó la necesidad de que el presidente electo, Javier Milei, encare una serie de reformas estructurales.

Un informe elaborado por la Fundación “Libertad y Progreso” en base a datos oficiales muestra señales de alarma para el gobierno entrante: Argentina se encuentra en “estanflación” (recesión con inflación) desde el año 2011; Alberto Fernández entrega el gobierno con un 813,7% de inflación desde diciembre de 2019 hasta la fecha.

En este sentido, se indicó que la actividad económica tocó un pico en julio del 2022, que sin embargo estuvo al mismo nivel del alcanzado en octubre de 2017. Comparado a ese valor, hoy el Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) está 0,8% por debajo. Todo en el marco de una fuerte “aceleración” en los precios, que tocaron el 142%

interanual, los niveles máximos desde 1991.

En lo vinculado a este tema, el director ejecutivo de la Fundación, Aldo Abram, afirmó a La Mañana que la estanflación es “un término técnico utilizado para describir una realidad que tenemos los argentinos”.

“Si no se resuelven los problemas actuales, la estanflación se va a profundizar”, apuntó; y evaluó que a fin de año, la inflación interanual se ubicará en torno al 180%. No obstante, recalcó que esta situación no puede ser resuelta “de un día para el otro”, y que los primeros meses de 2024 tendrán una suba de precios creciente. “Si el próximo gobierno trabaja para resolver los problemas, a mediados del año próximo la economía comenzaría a recuperarse y la inflación empezaría a bajar”, opinó.

En otro orden, Abram subrayó que entre las primeras medidas que debería tomar el economista Javier Milei tras asumir la presidencia de la Nación es “buscar la forma de salir del cepo cambiario actual, que nos está llevando a algo que podemos evitar, que es un ‘estallido’ hiperinflacionario”, al igual que un conjunto de reformas estructurales, que deben incluir una adaptación de “las estructuras y las leyes” a los cambios que se están registrando en el mundo “desde hace 60 años”.

“Durante décadas, dejamos que los políticos construyan un Estado que le sirve a la política y que se sirve de los ciudadanos”, alertó; y aseveró que la dirigencia política argentina “gasta más de lo que los argentinos podemos pagar”.

“Este esquema es inviable, y a pesar de que lo hemos probado, lo fuimos repitiendo, gobierno tras gobierno. Debemos tener un Estado que sea eficiente, que nos sirva a los argentinos, y que lo podamos pagar, si queremos abandonar esta realidad de ir de cesación de pagos en cesación de pagos, y de quiebre del Banco Central en quiebre del Banco Central”, explicó Abram a este Diario.

A su vez, planteó que una persona que tiene ingresos medios bajos hoy trabaja “casi la mitad del mes para el Estado”, debido a las altas cargas impositivas que tiene que abonar. “Según el Banco Mundial, la Argentina está en el puesto 21 entre los 191 países del mundo que más ‘exprimen’ con impuestos a las empresas. Después, queremos que los argentinos y los extranjeros inviertan acá y no en los 170 países que los tratan mejor”, agregó.

A continuación, advirtió que del total de depósitos bancarios, “sólo un tercio va a parar al sector privado, incluyendo a los consumidores”, mientras que el resto “va a financiar al Estado”.

Sumado a esto, Abram remarcó que el Banco Central sigue emitiendo pesos en exceso, con lo cual “genera inflación” y “saca a través del ‘impuesto inflacionario’ parte de nuestros recursos”, para seguir financiando el gasto de la clase política.

Por otro lado, el especialista expuso que durante los últimos 25 años, “más del 50% de los argentinos estuvo desempleado o en la informalidad, o contó con un seguro de desempleo disfrazado de empleo público, ocupando un cargo que no le sirvió a nadie en la sociedad”.