El gobierno consiguió aspirar los pesos y controló el dólar”
30 Agosto 2025
MOMARANDUM El licenciado Agustín Etchebarne, Director General de la Fundación Libertad y Progreso, analizó la coyuntura económica argentina y destacó el rol de las medidas aplicadas por el Gobierno para controlar la inestabilidad del dólar. Según explicó, “el gobierno consiguió aspirar los pesos y controló el dólar” mediante instrumentos como el aumento de encajes y la absorción de liquidez en el mercado.
Etchebarne aclaró que en realidad “no es el dólar lo que está intentando controlar el gobierno”, sino la relación entre oferta y demanda de pesos. En este sentido, señaló que la clave está en la inflación y su impacto en la demanda de dinero. Recordó que en los primeros meses de gestión existía un “exceso de pesos y deuda del Banco Central”, con tasas de interés que alcanzaban el 270% anual.
El economista explicó que el proceso incluyó el desarme de letras de corto plazo y su reemplazo por instrumentos de mayor duración, lo que generó tensiones temporales de liquidez. “Eso generó en medio de la campaña electoral… una escalada de las tasas de interés”, comentó. Al mismo tiempo, advirtió sobre el debate en el Congreso en torno a los vetos presidenciales, al afirmar que “están pegándole un tiro justamente con un cañonazo al superávit fiscal”.
DÉFICIT, DEUDA Y CONSUMO
Consultado sobre el estado de las cuentas públicas, Etchebarne reconoció que “en julio hubo un déficit financiero, correcto, de 0,3%”, aunque aclaró que en los primeros siete meses del año se mantiene el superávit. También respondió a quienes cuestionan la metodología contable al señalar que “lo que es el déficit que uno debiera tomar es el déficit en términos reales”.
Sobre la deuda pública, indicó que actualmente ronda los 465 mil millones de dólares, por debajo de los 491 mil millones existentes al inicio de la gestión. Destacó además que, considerando la inflación en Estados Unidos, la reducción es mayor. Según sostuvo, “la deuda medida contra el total de la actividad económica de la Argentina, que está creciendo, va a ser menor en términos del PBI”.
En cuanto al consumo, el economista aseguró que, pese a percepciones negativas, “en realidad si vos tomas el consumo entero está subiendo”. Aclaró que algunos rubros muestran caídas, como los supermercados mayoristas, pero otros registran incrementos significativos: “El consumo de carne aumentó”, “el consumo de electrodomésticos aumentó 75%” y “el consumo de autos subió fuertemente”. También mencionó un repunte en la indumentaria del 21%.
Etchebarne reconoció que la sensación social es de malestar porque “seguimos por debajo, por ejemplo, del año 2017”. No obstante, planteó que el salario real muestra una recuperación y que la economía en general atraviesa un proceso de ascenso gradual. Utilizó una metáfora para graficar la situación: “Estábamos abajo de la lona, habíamos caído del ring. Ahora por lo menos subimos al ring, pero seguimos cobrando”.
PERSPECTIVAS POLÍTICAS Y ECONÓMICAS
De cara al escenario electoral, Etchebarne anticipó que tras los comicios podría generarse un impulso adicional en la economía, condicionado por las decisiones en el Congreso respecto a los vetos presidenciales. Consideró que, si el oficialismo consolida su posición legislativa, “ese riesgo desaparece en diciembre”.
Asimismo, destacó el entendimiento entre el PRO y La Libertad Avanza, al afirmar que “ese acuerdo se va a ir profundizando” y que “le va a servir a la Argentina”. Resaltó la importancia de la política en los procesos económicos, señalando que “la economía y la política son dos caras de la moneda”.
Finalmente, identificó el principal riesgo para el país: “Que en algún momento la gente vuelva a votar a los populistas”. En su análisis, una transformación del peronismo en un partido no populista podría tener efectos positivos: “Argentina sería espectacular”.
Etchebarne aclaró que en realidad “no es el dólar lo que está intentando controlar el gobierno”, sino la relación entre oferta y demanda de pesos. En este sentido, señaló que la clave está en la inflación y su impacto en la demanda de dinero. Recordó que en los primeros meses de gestión existía un “exceso de pesos y deuda del Banco Central”, con tasas de interés que alcanzaban el 270% anual.
El economista explicó que el proceso incluyó el desarme de letras de corto plazo y su reemplazo por instrumentos de mayor duración, lo que generó tensiones temporales de liquidez. “Eso generó en medio de la campaña electoral… una escalada de las tasas de interés”, comentó. Al mismo tiempo, advirtió sobre el debate en el Congreso en torno a los vetos presidenciales, al afirmar que “están pegándole un tiro justamente con un cañonazo al superávit fiscal”.
DÉFICIT, DEUDA Y CONSUMO
Consultado sobre el estado de las cuentas públicas, Etchebarne reconoció que “en julio hubo un déficit financiero, correcto, de 0,3%”, aunque aclaró que en los primeros siete meses del año se mantiene el superávit. También respondió a quienes cuestionan la metodología contable al señalar que “lo que es el déficit que uno debiera tomar es el déficit en términos reales”.
Sobre la deuda pública, indicó que actualmente ronda los 465 mil millones de dólares, por debajo de los 491 mil millones existentes al inicio de la gestión. Destacó además que, considerando la inflación en Estados Unidos, la reducción es mayor. Según sostuvo, “la deuda medida contra el total de la actividad económica de la Argentina, que está creciendo, va a ser menor en términos del PBI”.
En cuanto al consumo, el economista aseguró que, pese a percepciones negativas, “en realidad si vos tomas el consumo entero está subiendo”. Aclaró que algunos rubros muestran caídas, como los supermercados mayoristas, pero otros registran incrementos significativos: “El consumo de carne aumentó”, “el consumo de electrodomésticos aumentó 75%” y “el consumo de autos subió fuertemente”. También mencionó un repunte en la indumentaria del 21%.
Etchebarne reconoció que la sensación social es de malestar porque “seguimos por debajo, por ejemplo, del año 2017”. No obstante, planteó que el salario real muestra una recuperación y que la economía en general atraviesa un proceso de ascenso gradual. Utilizó una metáfora para graficar la situación: “Estábamos abajo de la lona, habíamos caído del ring. Ahora por lo menos subimos al ring, pero seguimos cobrando”.
PERSPECTIVAS POLÍTICAS Y ECONÓMICAS
De cara al escenario electoral, Etchebarne anticipó que tras los comicios podría generarse un impulso adicional en la economía, condicionado por las decisiones en el Congreso respecto a los vetos presidenciales. Consideró que, si el oficialismo consolida su posición legislativa, “ese riesgo desaparece en diciembre”.
Asimismo, destacó el entendimiento entre el PRO y La Libertad Avanza, al afirmar que “ese acuerdo se va a ir profundizando” y que “le va a servir a la Argentina”. Resaltó la importancia de la política en los procesos económicos, señalando que “la economía y la política son dos caras de la moneda”.
Finalmente, identificó el principal riesgo para el país: “Que en algún momento la gente vuelva a votar a los populistas”. En su análisis, una transformación del peronismo en un partido no populista podría tener efectos positivos: “Argentina sería espectacular”.
