Falacias sobre inflación y crecimiento

Director en Iván Carrino y Asoc. | Website

Subdirector de la Maestría en Economía y Ciencias Políticas en ESEADE.

En su columna de ayer, provocativamente titulada “La Inflación Argentina no existe“, el economista Marcos Leonetti afirma:

“La obsesión por la inflación es errónea y conduce a una política monetaria que mina el crecimiento económico”, dice Ha-Joon Chang, uno de los economistas heterodoxos más renombrados internacionalmente. Claro, son conclusiones a las que arriba desde la experiencia por parte de una receta de crecimiento para pasar de un país subdesarrollado a ser uno industrializado.

“La obcecación por la hipervigilancia contra la inflación tiene costes significativos al nivel de vida y los resultados económicos (en lo que se refiere a la actividad industrial, el empleo y el crecimiento económico)”

Luego cita un estudio del Banco Mundial que le restarían importancia a la inflación para enfocarse en el crecimiento. ¿Qué hacemos entonces? Vamos al Banco Mundial y nos fijamos cuántos países crecieron en 2012 por encima de un razonable 4% anual. Luego, vemos cuántos de ellos tuvieron inflaciones superiores al 20%, al 10%, etc.

Aquí están ellos, los setenta países que publican datos y que en 2012 crecieron por encima del 4% (Argentina no está):

Sin título

Ahora veamos:

  • De un total de 70 países que crecieron más de 4% en 2012, solo 2 (solamente dos) países tuvieron inflación superior al 20%.
  • De un total de 70 países que crecieron más de 4% en 2012, solo 12 (solamente doce) países tuvieron inflación superior al 10%.
  • En cambio, del mismo total de 70 países que crecieron más de 4% en 2012 58 países tuvieron inflación por debajo de 10%.
  • No solo eso. Más del 50%, es decir, 38 países crecieron más de 4% anual con una inflación ¡inferior al 5 por ciento!

No se sigue de aquí que haya que bajar la inflación necesariamente para crecer. Pero definitivamente se sigue que la inflación no es de ninguna manera un requisito o un elemento necesario para pasar del subdesarrollo al desarrollo. De hecho, nuestra historia es tan inflacionaria que de ahí el título del artículo de Leonetti:

“Cabe afirmar que también es cierto que en estos últimos años la inflación está entre las más bajas de la serie histórica de la argentina reciente.”

Entonces, no “obcecarnos por la hipervigilancia contra la inflación” ¿ayudó a que pasáramos de ser un país subdesarrollado a uno desarrollado?

En realidad pasó todo lo contrario.

PBI - PBI USa

El gráfico anterior muestra que a principios de la década del 60 nuestro país tenía casi el 40% del PBI per Capita de Estados Unidos. Hong Kong, Japón y Corea del Sur estaban mucho más lejos. Es decir, estaban mucho más lejos de ser países desarrollados.

Hoy la imagen es muy diferente. Nuestro PBI per Capita es un 28% del de Estados Unidos mientras que el de Japón, por ejemplo, es 95% y el de Corea del Sur 46%.

PD: Leonetti nos consuela diciendo que la inflación actual “no existe” si la comparamos contra las elevadas inflaciones de nuestra propia historia. Sin embargo esa comparación no es válida ya que lo relevante es compararse con la actualidad y, si Leonetti leyera a Krugman (algo que seguramente hace) vería que hoy en día la alta inflación que padecemos es un fenómeno en extinción en el mundo.

.